La publicación del nuevo mapa del Departamento del Chocó por parte del Instituto Geográfico Agustín Codazzi, IGAC, en el que se incluye el corregimiento de Belén de Bajirá que perteneció hasta la semana anterior al municipio de Mutatá, desatará una confrontación jurídica y política que será protagonista durante las elecciones para Congreso y Presidencia de la República.
Juan Manuel Santos, con o sin conocimiento, no tiene nada que perder puesto que su mandato está terminando en el índice de desfavorabilidad del 81%, el más alto que haya tenido un presidente de Colombia. Es más, Juanma le ganó a Samper y a Pastrana, y eso es mucho cuento…
El Presidente Santos ha sido el único ser en la faz de la tierra con el talante suficiente para unir al país, pero para estar en su contra. En Antioquia, por ejemplo, su despropósito logró, además, que cerca de 30 congresistas que pertenecen a diferentes partidos y todas políticas tiraran para el mismo lado para defender el territorio.
Lo sucedido con el corregimiento de Belén de Bajirá, así se nos pegue la lengua al paladar, es el resultado del remanente y rezago de las omisiones políticas y gubernamentales para proteger el territorio antioqueño.
Lo que deben saber los ciudadanos preocupados por esa “tierrita” es cuál es la responsabilidad que tienen los gobernantes anteriores, los senadores y representantes a la cámara por Antioquia en un pleito que no se inició hace dos semanas, sino que lleva varios años.
Así como se perdieron varias millas náuticas con Nicaragua en inmediaciones del archipiélago de San Andrés y Providencia, al parecer por descuido gubernamental y político, lo mismo sucedió con el nuevo municipio del Chocó. ¿Quién responde por las omisiones del pasado?…
Lo cierto es que lo sucedido entre Chocó y Antioquia será tema para las elecciones del 2018 en las que los representantes y candidatos apoyados por el gobierno saliente de Juan Manuel Santos no podrán venir a la montaña debido a que los sacarán a sombrillazos de este Departamento…