En un café de un centro comercial del sur de la ciudad me encontré con un concejal que me dio a entender que atraviesa por una gran encrucijada en el alma debido a que, de los dos candidatos a la Alcaldía de Medellín con opción de poder, Alfredo Ramos Maya y Santiago Gómez no sabe por quién de ellos votar…
El hombre me dijo que, dadas las circunstancias actuales, de todo puede pasar entre los dos aspirantes debido a que cuentan con respaldos importantes, decisorios para ganar las elecciones territoriales.
Pregunté que cuál era la impresión que tiene sobre la campaña de Daniel Quintero y respondió que el candidato por el Movimiento Independientes, segundo en las encuestas, la tiene, pero bastante difícil para llegar al poder.
Dijo que todo el “sistema”, los políticos y empresarios de derecha con asiento en Medellín harán hasta lo imposible para que a Daniel Quintero no le abran la puerta de la Alcaldía, es decir, casi todos contra Daniel, porque los pocos integrantes de la izquierda democrática en la ciudad están divididos entre unos cuantos candidatos incapaces de unirse en torno a un proyecto con opción.
Además, sostuvo que, a unos 24 días para las elecciones, la campaña apenas está tomando forma en la que se avizora un final de elecciones repleta de propaganda negra, la mayoría en contra de quien fuera el fundador del Partido del Tomate, cuartel que dejó, en su momento, bastantes políticos incómodos en la Capital de Antioquia.
Daniel Quintero, argumenta el político, está solo en Medellín y no cuenta con respaldos fuertes con los que pueda sostener una plataforma “estable” para soportar la andanada de críticas que tiene encima, incluyendo por las redes sociales.
Estas razones son las que hacen pensar a algunos analistas que ven casi que imposible que Quintero Calle sea electo alcalde, y por el contrario, le dan fuerza no sólo a Alfredo Ramos, primero en las encuestas, sino también a Santiago Gómez que viene subiendo en la intención de voto y que cuenta con la maquinaria bien aceitada del gobierno de Gutiérrez para pelear el domingo 27 de octubre.
Ahora bien, desde el inicio de la jornada electoral se había hablado de la posibilidad de que las campañas de Centro Democrático que avaló a Alfredito Ramos Maya como candidato único y la del alter ego del alcalde, Santiago Gómez tuvieran o llegaran a un acuerdo para unirse al final de la contienda. Ese asunto parece ser que ya no es posible.
La partida de ajedrez está cambiando, a estas alturas no habrá alianza o coalición para la Alcaldía de Medellín pues Ramos Maya puntea en las encuestas y no se va a bajar, mientras Gómez Barrera viene subiendo y tampoco va a ceder.
Además, desde la campaña de Santiago Gómez tomaron la decisión de iniciar una nueva estrategia electoral que incluye el cambio de imagen publicitaria y la de vincular nuevos integrantes, tres exsecretarios de despacho más, provenientes de la Alcaldía del carismático Federico.