La presión que está ejerciendo la llegada de los tres nuevos concejales de Medellín que pertenecen a la bancada del partido Centro Democrático le está quintando el aire a las cabildantes Nataly Vélez y Lina García, quienes renunciaron al “uribismo” a finales del mes de junio.
La carta que envió la directora nacional de Centro Democrático, Nubia Stella Martínez al presiente del concejo Lucas Cañas hace parte del enredo jurídico en el que se debate la propiedad de las curules de corporaciones públicas de elección popular.
A quién pertenecen las curules a los partidos o a los políticos, es la pregunta sin respuesta en la que bailan los jurisconsultos de acuerdo a la conveniencia de sus clientes.
Lo cierto es que la carta de Martínez basada en una sentencia del Consejo de Estado fue contundente:
“En virtud de las renuncias a la militancia radicadas al Partido Centro Democrático por las concejales Nataly Vélez Lopera y Lina Marcela García Gañan, es jurídicamente imposible que las candidatas que habían resultado electas para desempeñarse como concejales del municipio de Medellín – Antioquia, sigan ocupando las curules obtenidas en representación de nuestra colectividad política.
Resulta incongruente e incoherente a todas luces, que estas personas que renunciaron a la militancia de nuestra organización política quieran seguir representándonos en la corporación pública de manera individual y sin el ánimo de unidad y disciplina partidista, razón por la cual al haber renunciado a la militancia de manera accesoria se renuncia a la curul ostentada, esto con el fin de no afectar el régimen de bancadas.
Por lo anteriormente expuesto solicitamos a la mesa directiva del Concejo de Medellín – Antioquia, inicie el trámite de que trata el artículo 134 de la Constitución Política y llame a ocupar dichas dignidades a los candidatos que según el orden de inscripción o votación obtenida, le sigan en forma sucesiva y descendente de quienes fueron proclamados como concejales, con esto lo que buscamos es que se protejan los derechos fundamentales al debido proceso, elegir y ser elegido, a la igualdad y al trabajo, de quienes deben ocupar dichas dignidades por ser militantes activos del Partido Centro Democrático”.
Lea: ASÍ HABLAN LOS NUEVOS DE CD
Dirección @CeDemocratico @NubiaSMartinez solicitó al @ConcejoMedellin sean retiradas de sus curules las concejalas @NatalyVelezL y @LinaGarciaGanan por haber renunciado al Partido. pic.twitter.com/tVhy9JVBko
— Rubén Benjumea (@puntodevistardb) July 13, 2022
“RESTREPO NO ES VOCERO”: LIZCANO
La discusión sobre la propiedad de las curules es de vieja data y años atrás. Cuando José Nicolás Duque Ossa se desempeñó como concejal de Medellín lo hizo a nombre del Partido de la U, cuando su esencia era “uribista”.
Nicolás, que trabajaba con Juan Carlos Vélez, quien pretendía ser alcalde de la ciudad, desobedeció las directrices de su colectividad al punto que fue expulsado de La U, se atornilló en la curul, perdiendo, además, el voto y la posibilidad de proponer debates de control político.
En ese entonces a Lina García Gañan, integrante de La U, los votos no le alcanzaron para llegar al Concejo por lo que, ejecutoriada la expulsión de Nicolás Duque de ese partido, el derecho a la curul lo tenía supuestamente García Gañan.
Lina y su apoderado, el jurisconsulto conocedor de temas electorales, emprendieron las respectivas querellas al punto que la misma sentencia del Consejo de Estado con la que pretendían quitarle la curul a Duque Ossa, es con la que en la actualidad el presidente del Concejo Lucas Cañas se basará para tomar una decisión sobre si acepta o no el requerimiento de Centro Democrático que reclama la propiedad de las curules no sólo de Lina García, sino también la de Nataly Vélez. Ver Sentencia
Una cosa es ser expulsado y otra muy distinta haber renunciado al partido por el que se ganó la elección popular, es otro de los argumentos que aducen los uribistas que quieren recuperar las curules de ambas muchachas.
Ahora bien, la otra fresa del postre es que tanto el secretario general encargado Conrado de Jesús Torres Graciano como el presidente del Concejo Lucas Cañas tendrán que conseguir la suficiente ilustración jurídica para determinar o no la legitimidad de las votaciones en las que están incurriendo en la actualidad García y Vélez, quienes vienen participando, como si nada hubiera pasado después de la renuncia al partido con el que fueron electas en octubre de 2019.