El jueves de la semana anterior, un día después de conocerse la existencia de una red privada prestadora de servicios que supuestamente se las ingenia para defraudar al Sistema Nacional en Salud, se conoció la renuncia y salida del vicepresidente administrativo del Grupo Sura, Fernando Ojalvo Prieto.
Lo bueno es que estamos seguros que desde la presidencia de David Bojanini también se vieron las cuatro temporadas de “House of Cards”de Netflix, excelente maestría de cómo se combina el poder, la política y el periodismo.
El jueves anterior se conoció la salida del Grupo del señor Ojalvo, quien llegó a su mayoría de edad que lo avala para recibir su jubilación tras veinte años de trabajo con SURA, situación que le permitirá dedicarse a su natal Jericó, a la Madre Laura y a viajar por el mundo en compañía de su familia. Bien merecido…
Sin embargo, con un poco de suspicacia, la salida de Fernando Ojalvo genera un interrogante: ¿quién asumió el costo de la denuncia sobre la existencia de la tal red que hizo el concejal Bernardo Alejandro Guerra, y que además quieren minimizar? Averígüelo Vargas…