El despelote mediático generado por actos de corrupción en el gobierno, no les impide a los políticos usar las artimañas y estrategias necesarias para lograr una curul en el Congreso de la República. Es más, a los aspirantes no les importa la corrupción, y por el contrario, utilizan esa palabra como estrategia de campaña.
Los que pretenden aspirar a una silla en el Congreso no la tendrán fácil porque deberán contar, por lo menos, con una tula llena de billetes. En la Costa, por ejemplo, es necesario un bolso con $20.000’000.000 (veinte mil millones de pesos), en caja para “cotizar” una buena campaña.
Por esa razón algunos políticos pobres de bolsillo, corazón y espíritu acuden a otras estrategias de fácil acceso al parlamento como las listas cerradas.
Centro Democrático, estrenó esa opción en las elecciones de 2013 y posibilitó que personas, nuevos políticos, sin carrera, sin conocimiento y hasta sin talento ni votos lograrán acceder al Congreso.
Aunque todavía se desconoce si la lista de CD será abierta o cerrada lo más seguro es que para las elecciones del próximo año se espera que el gran jefe, el dueño de los sufragios, Álvaro Uribe vuelva a encabezar la lista para Senado.
Se han escuchado diagnósticos que la polarización entre Gobierno-Farc versus oposición es tan fuerte, que Uribe podría alcanzar la conformación de una bancada en el Senado por encima de las 30 curules.
Entre el sonajero por Antioquia también se habla que esa lista podría estar integrada nuevamente por José Obdulio Gaviria, quien quiere repetir en el Senado, al igual que Alfredo Ramos Maya que desea apuntarse a una elección territorial en 2019. En la misma situación se encuentra Paola Holguín que tiene derecho a conservar su silla en la cámara alta.
Los nuevos que podrían aparecer en la lista acompañando a Uribe serían Santiago Valencia, el hijo de Fabio, y Regina Zuluaga que no podría repetir en la Cámara por estar inhabilitada puesto que su hermanito Obed es Alcalde de Sonsón en el oriente de Antioquia.
Igualmente suenan para senado Fabio Aristizábal, “el hombre de la paella y pa´ti” que no ha podido pegarle a la peña, y Claudia “La Twittera” Bustamante, a quien todavía no saben dónde acomodar, si en la lista para Senado o para Cámara.
