Una campaña política está compuesta por candidatos viables e inviables, sencillo. Los viables, es decir los que tienen posibilidad de llegar al poder son bastantes cuidadosos a la hora de prometer propuestas que no se pueden cumplir.
Los candidatos inviables, es decir, los que no tienen opción alguna para llegar al poder, prometen hasta misa, regalan casas, marranos, gallinas, becas del estudio del 100% y hasta salarios mínimos para supervivencia como el caso de las FARC.
Sentido de realidad y sensatez es lo que le hace falta a la última propuesta de varios de los integrantes de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común, FARC. Los integrantes del recién desmovilizado grupo guerrillero, propusieron crear un mínimo vital para jóvenes sin puesto de trabajo, madres cabeza de familias desempleadas y adultos de la tercera edad sin pensión. Desde la teoría bastante solidario, pero desde el recaudo fiscal, bastante jodido.
Según el ideólogo fariano, Carlos Antonio Lozada en caso de llegar al poder impulsarían la propuesta para subsidiar a varios millones de personas que le costarían al Estado unos 60 billones de pesos financiados por las FARC a través de combatir la corrupción y la eliminación de las exenciones y privilegios.